Ayer, la Alcaldía de Santa Marta, a través de la Secretaría de Seguridad, emitió un comunicado desmintiendo el secuestro del empresario hotelero Augusto Rico y Ancizar Borjas, uno de sus empleados, en el Parque Tayrona.
De acuerdo con el comunicado oficial, al conocerse el caso, el Gaula actuó de manera inmediata. Se estableció contacto con Rico, quien fue llevado a la estación Bureche. Allí se determinó que no se había producido ningún secuestro, aunque se señaló que “los hechos aún eran materia de investigación”.
El hotel Ecohabs Bamboo Tayrona emitió un comunicado confirmando los hechos, asegurando que se trató de un secuestro extorsivo por parte de las Autodefensas Conquistadoras de la Sierra Nevada. El hotel sostiene que estas organizaciones buscan mantener su dominio en los territorios del Parque Tayrona y la zona rural a través de la violencia.
Según el comunicado del hotel, el incidente ocurrió alrededor de las 9:00 am del sábado 5 de abril. 18 hombres encapuchados y armados atacaron el establecimiento, sometiendo a Rico, a la abogada, la contadora, el administrador y Ancizar Borja Sánchez.
El comunicado describe cómo las víctimas fueron cubiertas con fundas de almohada, llevadas a ciegas en camionetas con vidrios polarizados y obligadas a cruzar un río y varias quebradas, evidenciando la intención de los captores de internarlos en una zona remota.
Una vez en una casa en la montaña, Rico fue obligado a firmar documentos en blanco y estampar su huella dactilar bajo presión psicológica y amenazas de muerte. El hotel argumenta que esto buscaba despojarlo de su patrimonio y silenciar cualquier intento de denuncia.
Ecohabs Bamboo Tayrona indica que Rico y los otros cuatro empleados fueron liberados alrededor del mediodía del domingo. Sin embargo, Ancizar Borja permaneció retenido hasta las 5:00 pm del domingo, utilizado como garantía para asegurar que no se denunciaría el secuestro y que se podrían realizar los trámites para despojar a Rico de su patrimonio.
El comunicado del hotel enfatiza la naturaleza del secuestro extorsivo agravado con tortura psicológica a la que fueron sometidas las víctimas, calificándolo como un delito de lesa humanidad perpetrado con el objetivo de obtener beneficios económicos. Agradecen la labor del Gaula y la oportuna denuncia del abogado José Humberto Torres.
La administración distrital volvió a pronunciarse tras conocerse el comunicado del hotel, indicando que los entes competentes establecerán mediante la investigación los detalles de los hechos para esclarecer lo sucedido. Aseguran que las autoridades cuentan con el total respaldo de la Alcaldía Distrital de Santa Marta para el desarrollo de sus funciones.