Un viaje con expectativas de crecimiento profesional terminó en tragedia para dos jóvenes en el Magdalena. Andrés Felipe, un futbolista con sueños de llegar a ser profesional, y su primo Harold Maestre, perdieron la vida el pasado 1 de mayo en la Troncal del Caribe, a pocos metros de la sede de la empresa Drummond.
Ambos se dirigían a Gaira desde Fundación, su pueblo natal. Andrés buscaba obtener un paz y salvo del Unión Magdalena, club donde se formó en las divisiones menores. El documento era esencial para continuar su proceso con otro equipo de la costa. Al no conseguirlo, emprendieron el regreso en motocicleta.
El ataque fue repentino y brutal. Los primos eran seguidos por una motocicleta desde minutos antes del crimen. Los agresores aprovecharon el momento oportuno para abrir fuego. Harold murió de inmediato. Andrés Felipe, aún con vida, intentó escapar corriendo por la carretera, pero fue alcanzado por las balas y cayó junto al pavimento.
El hecho fue presenciado por militares destacados en un puesto de control cercano. Su rápida reacción permitió una persecución inmediata que terminó en la captura de los presuntos sicarios a la altura del barrio La Paz. Las autoridades no han revelado sus identidades, pero ya están en manos de la justicia.
Las investigaciones sobre los posibles móviles del crimen siguen en curso. Se descarta la posibilidad de que esté relacionado con ajustes de cuentas, deudas personales o algún episodio previo que haya motivado la emboscada.
