Asesino confeso del padre Darío Valencia enfrenta extradición y excomunión en Pereira.

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El Obispo de Pereira, monseñor Rigoberto Corredor Bermúdez, ha afirmado que las autoridades eclesiásticas están abordando dos temas específicos.

El confeso asesino del padre Dario Valencia en Pereira, enfrenta un panorama complejo que incluye extradición y excomunión. La Fiscalía colombiana, tras un análisis exhaustivo del caso, solicitará la extradición del presunto homicida a Estados Unidos, donde se encuentra prófugo.

El hombre, identificado como John Freddy García, era un exseminarista y conocido del sacerdote desde hace varios años. Según la Fiscalía, García tenía antecedentes por violencia intrafamiliar en Estados Unidos y fue expulsado del seminario por su comportamiento inapropiado.

El padre Valencia, reconocido por su labor social y pastoral en la comunidad de Pereira, fue asesinado en su residencia el pasado 4 de agosto. El cuerpo del sacerdote fue encontrado con signos de violencia, lo que generó conmoción en la ciudad y en la comunidad católica.

La Fiscalía ha recopilado pruebas contundentes que vinculan a García con el crimen. Entre ellas, se encuentran testimonios de personas que lo vieron en el lugar de los hechos, además de evidencia forense. La investigación también reveló que García había estado planeando el asesinato del padre Valencia durante varias semanas.

La extradición del presunto homicida a Estados Unidos, donde se encuentra prófugo, es un proceso que puede llevar tiempo. Sin embargo, la Fiscalía se encuentra trabajando con las autoridades estadounidenses para agilizar el trámite.

Por otro lado, la Iglesia Católica ha anunciado que se llevará a cabo un proceso para determinar la excomunión de García. La excomunión es una pena eclesiástica que implica la separación del individuo de la comunidad católica.

El caso del padre Valencia ha generado un profundo dolor en la comunidad de Pereira y ha reavivado el debate sobre la seguridad de los sacerdotes y religiosos en Colombia. La violencia contra religiosos es un problema creciente en el país, lo que ha generado preocupación entre las autoridades y la Iglesia Católica.

El arzobispo de Pereira, monseñor Ricardo Tobón, ha condenado el crimen y ha expresado su solidaridad con la familia del padre Valencia. También ha pedido a la comunidad católica que ore por la paz y la justicia.

En el marco de la investigación, la Fiscalía continúa recopilando información y realizando diligencias para esclarecer todos los detalles del caso. La familia del padre Valencia ha pedido que se haga justicia por su muerte y que se ponga fin a la violencia contra los religiosos.

La muerte del padre Valencia ha dejado un vacío en la comunidad de Pereira, donde era querido por muchos. Su legado de servicio y compromiso con los demás perdurará en el tiempo. La extradición y la excomunión que enfrenta el presunto homicida son pasos importantes en la búsqueda de justicia para el padre Valencia y para su familia.

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