Un agente de tránsito de Cali fue víctima de una agresión física durante un procedimiento por mal estacionamiento en el centro de la ciudad. El incidente ocurrió el pasado 7 de abril en la carrera séptima, entre calles 15 y 16, una zona con alta congestión vehicular.
El agente, quien realizaba su ronda habitual junto a un grupo de servicios especiales, detectó un vehículo que obstruía el paso. Al iniciar el procedimiento correspondiente, el conductor se presentó, entregó su documentación y, en cuestión de segundos, reaccionó con violencia. Según el relato del funcionario, fue empujado y golpeado en el rostro en varias ocasiones por el conductor, quien luego huyó del lugar.
El agente solicitó apoyo al cuadrante policial más cercano, pero no recibió respuesta, lo que permitió al agresor escapar sin ser detenido. El hecho quedó registrado en video y se viralizó rápidamente en redes sociales, generando indignación entre los ciudadanos.
La Secretaría de Movilidad de Cali confirmó que el agresor ya fue plenamente identificado gracias a la información recopilada durante el procedimiento, lo que permitirá iniciar un proceso judicial en su contra. El agente sufrió fuertes golpes en la cabeza.
El secretario de Movilidad, Gustavo Orozco, condenó enérgicamente la agresión: “Seguimos viendo actitudes violentas contra la autoridad, como si cumplir la ley fuera opcional. Agredir a un agente de tránsito no es un juego, es un delito”.
Orozco resaltó que este no es un caso aislado y que los ataques contra funcionarios de tránsito en Cali han aumentado en los últimos meses. Esto, según el secretario, no solo pone en riesgo la vida e integridad de los agentes, sino que también dificulta la organización vial y el cumplimiento de las normas.
En Colombia, la agresión a servidor público está tipificada como delito en el artículo 429 del Código Penal, con sanciones que pueden ir desde cuatro hasta ocho años de prisión, dependiendo de la gravedad del hecho. Las autoridades insisten en que este tipo de conductas no pueden quedar impunes.
La Secretaría de Movilidad reiteró que llevará este caso ante las instancias judiciales correspondientes y recordó que se mantienen los esfuerzos por garantizar la seguridad de sus funcionarios. “No se puede permitir que quienes cumplen con su deber sean tratados como enemigos”, sentenció Orozco.