Un hombre de 44 años perdió la vida en un lavadero de carros en Bogotá, tras una discusión que derivó en un ataque con un destornillador. El hecho ocurrió poco antes del amanecer del domingo.
Según testigos, Diego Fernando Padilla Hernández llegó al establecimiento en estado de alicoramiento y, aparentemente, buscaba confrontar a uno de los trabajadores. Las cámaras de seguridad captaron el momento en que Padilla entra al lugar y se acerca a D. Ochoa Gómez, quien estaba revisando su celular. Se observa que Padilla le habla al trabajador y, de un momento a otro, lo empuja. Ochoa intenta alejarse, pero minutos después Padilla vuelve a increparlo.
En ese momento, Ochoa reaccionó violentamente y le propinó una puñalada en la nuca con un destornillador. Padilla cayó al suelo mientras los presentes buscaban ayuda. Los trabajadores intentaron detener la hemorragia con trapos improvisados mientras esperaban la llegada de la policía.
Padilla Hernández fue trasladado a un centro asistencial, pero los médicos no pudieron salvarle la vida. El presunto agresor, en estado de shock, intentó huir, pero fue detenido por los uniformados.
Ochoa, de nacionalidad venezolana y criado en Valledupar, trabajaba en el lavadero por temporadas. Según un compañero, Ochoa no era problemático y no tenía antecedentes. Dijo que reaccionó impulsivamente y que el ataque no fue premeditado.
El joven fue imputado por homicidio y se recopilaron pruebas para el proceso judicial.