La publicación del empresario Mario Hernández, quien respaldó al exalcalde de Bogotá Enrique Peñalosa como posible candidato presidencial para 2026, generó un debate sobre la participación del sector empresarial en la política nacional.
Hernández, en su cuenta de X, calificó a Peñalosa como un “excelente candidato”, expresando su apoyo en un mensaje que rápidamente generó reacciones. La senadora María Fernanda Cabal, del Centro Democrático, respondió con una crítica generalizada al rol de los empresarios en la política. Cabal cuestionó la participación empresarial en asuntos políticos, afirmando que “cuando actúan, lo hacen de dos formas: o invierten en varias canastas ideológicas para proteger su negocio o se emocionan con pasiones de coyuntura”. En su opinión, los empresarios, aunque exitosos en sus industrias, carecen de coherencia cuando incursionan en política, lo que los vuelve “erráticos”.
El respaldo de Hernández a Peñalosa no es nuevo. En febrero de 2025, ya había expresado su admiración por el exalcalde en la misma red social, calificándolo como “el mejor alcalde”. En esa ocasión, algunos usuarios lamentaron que, según ellos, “la envidia local no lo deja llegar a presidente”.
La polémica surge en un contexto en el que Peñalosa ha confirmado su intención de postularse nuevamente como precandidato presidencial. En una entrevista, el exmandatario bogotano aseguró estar convencido de que puede ofrecer una visión de desarrollo y orden para Colombia, recordando que en anteriores contiendas también enfrentó cifras desfavorables en las encuestas y logró imponerse.